Son muchos los profesionales que te pueden derivar al logopeda (odontólogos otorrinolaringólogos, foniatras, maestros, pediatras, psicólogos, etc.). Sin embargo, es importante conocer algunos signos de alerta que te pueden orientar a consultar este profesional. Es importante que el logopeda haga una valoración y diagnóstico de la forma más precoz posible y un plan terapéutico individualizado, para poder abordar de la manera más rápida y eficaz el motivo de la consulta.
Signos de alerta en los niños:
Si empieza a hablar con retraso, tiene recursos lingüísticos pobres o no utiliza el lenguaje como herramienta principal de comunicación.
Si no comprende instrucciones sencillas del adulto.
Si su habla es difícil de entender.
Si tiene dificultad para pronunciar algunos fonemas, sustituye o omite a la hora de hablar.
Si tartamudea al hablar.
Si tiene poco vocabulario para su edad, le cuesta construir frases, omite palabras o las desordena.
Si tiene una maloclusión, mastica con poca fuerza y come despacio, come con la boca abierta o interpone la lengua entre los dientes.
Si es respirador oral.
Si se queda afónico o disfónico con frecuencia.
Si tiene dificultades para leer (lee muy lento, omite o sustituye letras o palabras, se atasca …) y escribir (omite o sustituye letras, junta palabras, hace muchas faltas de ortografía, hace mala letra …).
Si tiene dificultades para comprender textos y enunciados de ejercicios y problemas.
Signos de alerta en los adultos:
Si se queda disfónico o afónico de manera frecuente.
Si su habla es disfluente y tartamudea.
Si le cuesta masticar y / o tragar.
Si se atraganta con frecuencia.
Si está diagnosticado de una enfermedad neurodegenerativa y tiene alterada su habla o su lenguaje (Parkinson, ELA, Esclerosis Múltiple etc.).
Si ha tenido un Ictus y presenta dificultades para expresarse o comprender.
Ha sufrido la Covid19 y presenta secuelas
En el Centro Sanitario Portí disponemos de una logopeda colegiada en el Colegio de Logopedas de Cataluña, con más de veinte años experiencia e implicada en el trabajo en equipo, que apuesta por la formación continuada para poder ofrecer un servicio de la máxima calidad, siempre basado en la evidencia científica.